La testosterona es una hormona clave en la salud masculina, y sus niveles pueden influir en aspectos importantes como la energía, el deseo sexual, la masa muscular y el bienestar general. Medir la testosterona se ha vuelto más común, especialmente entre hombres que experimentan síntomas de fatiga, bajo deseo sexual, disfunción eréctil o problemas de concentración. En este artículo, exploraremos qué es la testosterona, cómo se realiza su medición y por qué es relevante mantener un nivel adecuado.

¿Qué es la testosterona?

La testosterona es una hormona producida principalmente en los testículos en los hombres, aunque también se produce en pequeñas cantidades en las glándulas suprarrenales y en los ovarios de las mujeres. Es la principal hormona sexual masculina y juega un papel crucial en el desarrollo de características como la musculatura, la densidad ósea, la distribución de grasa corporal y la producción de esperma. También influye en el estado de ánimo y la energía.

Los niveles de testosterona varían con la edad, siendo más altos en la adolescencia y disminuyendo gradualmente a medida que los hombres envejecen. Sin embargo, algunas condiciones pueden provocar una caída prematura o más drástica de los niveles de testosterona, lo que se conoce como hipogonadismo.

¿Por qué es importante medir la testosterona?

La medición de testosterona es clave para diagnosticar y tratar una variedad de condiciones. Entre las razones más comunes para realizar esta medición se incluyen:

• Síntomas de bajos niveles de testosterona: Fatiga crónica, disfunción eréctil, pérdida de masa muscular, aumento de grasa corporal y disminución del deseo sexual son síntomas comunes que pueden sugerir una baja en esta hormona.
• Diagnóstico de hipogonadismo: Si se sospecha que el cuerpo no produce suficiente testosterona, un análisis de sangre puede confirmarlo.
• Problemas de fertilidad: La testosterona baja puede afectar la producción de esperma y, en consecuencia, la fertilidad masculina.
• Evaluación de enfermedades: La medición de testosterona también puede ser útil en el diagnóstico y manejo de ciertas enfermedades, como el cáncer de testículo o la enfermedad de la hipófisis.

¿Cómo se mide la testosterona?

La testosterona se mide mediante un análisis de sangre, que suele realizarse por la mañana, ya que los niveles de la hormona tienden a ser más altos en las primeras horas del día. El médico puede solicitar diferentes tipos de pruebas de testosterona:

1. Testosterona total: Mide tanto la testosterona que está ligada a proteínas en la sangre (la mayoría) como la testosterona libre (no unida), ofreciendo una visión global del nivel hormonal.
2. Testosterona libre: Mide la testosterona que no está unida a proteínas. Esta forma es la que puede entrar en las células y realizar funciones biológicas, por lo que es importante para evaluar los niveles activos de la hormona.
3. Testosterona biodisponible: Incluye la testosterona libre y aquella débilmente unida a una proteína llamada albúmina, que también puede ser utilizada por el cuerpo.

¿Cuáles son los valores normales de testosterona?

Los niveles normales de testosterona pueden variar según el laboratorio y la técnica utilizada, pero generalmente se considera que los niveles de testosterona total en hombres adultos oscilan entre 300 y 1000 ng/dL (nanogramos por decilitro). Sin embargo, lo que es “normal” puede variar según la edad y la salud general del paciente.

• Testosterona baja: Menos de 300 ng/dL. Esto puede estar asociado con hipogonadismo u otros trastornos hormonales.
• Testosterona alta: Más de 1000 ng/dL. En algunos casos, esto puede ser consecuencia de terapias de reemplazo hormonal o de ciertos tumores.

¿Qué puede afectar los resultados de la medición de testosterona?

Varios factores pueden influir en los niveles de testosterona en sangre:

• Edad: Los niveles disminuyen gradualmente a partir de los 30 años.
• Estrés: El estrés crónico puede disminuir los niveles de testosterona.
• Actividad física: Ejercicio intenso, especialmente el entrenamiento con pesas, puede aumentar temporalmente los niveles de testosterona.
• Enfermedades o medicamentos: Algunas afecciones, como la obesidad o la diabetes, y medicamentos como los esteroides anabólicos pueden alterar los niveles de testosterona.

¿Qué sigue si tienes testosterona baja?

Si los resultados muestran niveles bajos de testosterona y los síntomas son consistentes con esta deficiencia, el médico puede recomendar un tratamiento de reemplazo de testosterona (TRT, por sus siglas en inglés). Este tratamiento puede administrarse de varias formas, incluyendo geles tópicos, inyecciones o parches. Sin embargo, es importante tener en cuenta los posibles efectos secundarios y la necesidad de un seguimiento médico adecuado.

El tratamiento con testosterona no está exento de riesgos, por lo que es crucial que el diagnóstico y tratamiento sean supervisados por un especialista.